ROJOS, AZULES, NEGROS… CUATRO AÑOS DE INFORMALISMO 1979-1982
Exposición de Toño García / Cedida por el Instituto Leonés de Cultura / SALA DE EXPOSCIONES, CENTRO POLIFUNCIONAL DE FABERO /
El artista y diseñador gráfico Antonio García García, más conocido como “Toño”, inauguró en septiembre una exposición de pintura en el Museo de León. Parte de esta obra expuesta, se ha seleccionado para formar parte del conjunto de muestras itinerantes por la provincia de León que organiza y coordina el Departamento de Arte y Exposiciones del ILC, gracias a la cesión de la obra de forma temporal y gratuita del artista Antonio García García Toño. En total se han seleccionado un conjunto de 23 tres piezas, 21 pinturas individuales y un díptico. Piezas pictóricas de mediano formato todas, que se podrán ofrecer para su exhibición en las salas de exposiciones de los ayuntamientos, juntas vecinales o museos que lo soliciten.
Antonio García García, conocido popularmente como Toño nació en Astorga en 1951 y es pintor y diseñador gráfico, con una amplia experiencia y bagaje. En su trayectoria figuran más de 30 exposiciones individuales y también unas 70 colectivas; ha ganado múltiples certámenes de diseño y más de media docena de premios de pintura y cartelismo. Tiene obra en diversas colecciones y museos, y ha sido nombrado “Pintor mayor de la Maragatería”.
Con la muestra que presentó en el Museo de León, Antonio García García, Toño, planteó una profunda e interesante revisión de una etapa clave y se podría decir que fundamental, por la trascendencia que tuvo posteriormente de su biografía creativa. Etapa corta y muy poco conocida por el público en general, se debe de tener en cuenta que gran parte de la muestra, casi un noventa por ciento de las obras que la integraban la misma, no habían sido vistas por el público, puesto que nunca salieron del estudio del artista. El título de la exposición, “Rojos, azules, negros y… Cuatro años de informalismo 1979/1982”,alude a la recuperación y reedición de la experiencia abstracta e informalista del autor, puesto que como norma general cuando se habla de la obra de Antonio García García Toño, siempre se asocia a pintura vinculada al territorio de la figuración en sentido amplio del término. Obra esta, la figurativa que ha sido ampliamente desarrollada a través de varias series de gran interés formal e histórico, que sitúan su indagación artística entre una de las aportaciones más significativas que se han producido en nuestras tierras.
El trabajo que nos plantea, surge de su interés inicial por el informalismo español clásico vinculado al grupo Paso, pero sin duda sus obras plantean una estructuración clara y sincera de la utilización de las texturas y la materia, el equilibrio, el ritmo, la ordenación se apoderan de la composición generando un ordenamiento casi constructivo de las formas, que sin duda aleja su obra del sentido de gestualidad, materialidad e inmediatez de los informalistas españoles. Por otro lado, la exuberancia del color, que se vuelve energía pura y dinámica, introduce en sus composiciones una exaltación de color, luminosidad y limpieza propia del acrílico que utiliza en sus obras, aspectos que se alejan significativamente del sentido estricto, austero y en cierto sentido romántico del informalismo español.